Durante esta etapa de cuarentena, experimenta momentos de silencio como un hábito y una práctica saludable en tu estilo de vida.

En este momento de la cuarentena ha aumentado la vivencia del “ruido” físico y “subjetivo” en los espacios que habitamos.  Hablando del ruido físico, la calidad ambiental ha tenido modificaciones ya que habitualmente nuestra casa por ejemplo ha sido un lugar para el ocio y el descanso, lo que genera la experiencia de un lugar silencioso para vivir.

Y justo en estos días de confinamiento tenemos muchas actividades combinadas en un único espacio. Todas nuestra rutinas y actividades desde laborales, escolares, deportivas, etc., están concentradas en el mismo lugar, lo que puede afectar la calidad ambiental que nos rodea y movilizar experiencias de estrés y ansiedad.

El ruido que te acompaña, una cura que en realidad no cura

El silencio es una herramienta que favorece que te concentres en ti mismo, posibilitando capacidades de autoconfianza,

También es cierto que a manera de círculo vicioso, ante estas experiencias de estrés y ansiedad estamos con una ambivalente y creciente necesidad de buscar más ruido, un ruido subjetivo, con esta intención de no sentirnos solos o para aminorar la incertidumbre ante estos momentos de dificultad y evitar así un silencio que nos confronte con nuestros temores, aquello que pueda resultar doloroso o inquietante.

De repente te encontrarás buscando respuestas en Google, un continuo acompañamiento en las redes sociales, actitudes de trabajar mientras veo una película. Todo lo que resulte un paliativo para esta situación transitoria de la cuarentena y que dé una sensación de minutos, horas o días más “llevaderos”.

Es importante que en estos días también experimentes el silencio como una alternativa para descubrirte y sentir alivio.

Esta exposición y búsqueda de llenarnos de información, comida, llamadas, mensajes, más que calmarnos, muchas de las veces nos caotiza y genera mayores expresiones de estrés, insomnio, ansiedad y distintas reacciones que generan también confusión o malestar.

Reordena tu mente en silencio

Es importante que en estos días también experimentes el silencio como una alternativa para descubrirte y sentir alivio. Tómate un tiempo para apartarte y estar en silencio, lo que permitirá sentirte mejor y en una verdadera conexión contigo mismo en momentos complejos.

El silencio es una herramienta que favorece que te concentres en ti mismo, posibilita capacidades de autoconfianza, experiencias de lo que puedes comprender y ordenar por ti mismo. Permite que puedas tener una perspectiva distinta de lo que habías visto y te permita expresarte de otra forma en como lo habías hecho con anterioridad.

El silencio permite que hablemos de otro modo y es importante reflexionar el porqué se calla, debido a que el silencio no es una alternativa mágica.

Para Pedronel Manrique, especialista en psicología, el silencio permite que hablemos de otro modo y es importante reflexionar el porqué se calla, debido a que el silencio no es una alternativa mágica. Es una vía de higiene de nuestra mente y puede llevarnos a una mejor comprensión de lo que nos sucede. 

Experimenta momentos de silencio como un hábito y una práctica saludable en tu estilo de vida.

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