A veces no es fácil detectar la violencia de género. Y es que algunas mujeres no son concientes de que están siendo maltratadas, por miedo, culpa o falta de reconocimiento.

Llegó un nuevo año y estoy segura de que en tu lista de propósitos hay varios destinados a vivir mejor: desde encontrar un mejor empleo o dar algún paso académico que llevas tiempo posponiendo, hasta los básicos de hacer ejercicio y comer más sano. Quizá se aparece por ahí buscar pareja o mejorar la relación que ya tienes. Y ése es justo sobre el que quiero hablarte en esta ocasión: la violencia de género.

Violencia de género, un problema en aumento

 visibilizar la violencia de género, un problema que afecta a las mujeres en todo el mundo y que se agravó con la pandemia de Covid-19,

El 2021 fue un año muy importante en términos de visibilizar la violencia de género, un problema que afecta a las mujeres en todo el mundo y que se agravó con la pandemia de Covid-19, pues el confinamiento llevó a miles mujeres a tener que convivir con su agresor 24/7.

Tan solo entre enero y noviembre de 2021, en México hubo 233,978 víctimas de violencia familiar y 264,860 llamadas de emergencia al 911 para reportar incidentes de violencia contra la mujer.

Claro que para detener las violencias que lastiman a niñas y mujeres es indispensable el compromiso y trabajo de autoridades y organizaciones de la sociedad civil, pero lo interesante es que también podemos generar un cambio desde nuestras propias historias. Por eso, te comparto cómo detectar si sufres algún tipo de violencia de género.

Síntomas de maltrato a la mujer

A veces no es fácil detectar la violencia de género. Y es que algunas mujeres no son conscientes de que están siendo maltratadas.

A veces no es fácil detectar la violencia de género. Y es que algunas mujeres no son conscientes de que están siendo maltratadas. El miedo, la culpa, el shock pueden estar detrás de esta falta de reconocimiento. Por ello, los expertos analizan cuáles son las señales de sospecha.

Para ello resulta muy útil consultar el Violentómetro, un instrumento desarrollado por el Instituto Politécnico Nacional, que incorpora en escala las violencias más representativas, algunas de ellas poco conocidas o difíciles de detectar.

El Violentómetro incorpora en escala las violencias más representativas, algunas de ellas poco conocidas o difíciles de detectar.

Empieza con situaciones cotidianas que están normalizadas por la cultura patriarcal como:

  • Hacer bromas hirientes
  • Criticar tu apariencia
  • Chantajearte y engañarte
  • Te aplica la ley del hielo
  • Tiene celos de amigas o familiares
  • Te estoquea en redes sociales
  • No quiere que estudies
  • Controla tu tiempo
  • Te exige obediencia
  • Te grita y te insulta

Y avanza con actos que se llegan a minimizar, que cuando la víctima no está empoderada o carece de información, pueden terminar en patadas, amenazas con objetos o armas, e incluso forzar a tener relaciones sexuales.

  • Te amenaza con herirte o matarte
  • Te golpea la cara o cabeza
  • Te somete jalando tu cabello
  • Te sujeta hasta dejar moretones
  • Te lanza objetos peligrosos
  • Reacciona fuera de control
  • Te hace temer por tu integridad
  • Actúa como que si quisiera matarte

El Violentómetro acaba en la máxima agresión: el feminicidio. El objetivo de esta tabla es crear conciencia sobre todas las formas de violencia de género. Y cómo todas ellas están conectadas e implican un riesgo latente de muerte. Lee también: 10 acciones que también son violencia contra la mujer

Frente al maltrato, ¡cero tolerancia!

Observa los diferentes grados de violencia de género y detecta si mientras lo haces hay cambios en tu respiración o temperatura corporal.

Con todo esto no quiero asustarte, pero sí invitarte a que a través de tu conciencia corporal conectes con tus emociones y sensaciones a la hora de revisar este muy útil instrumento.

Mientras ves los diferentes grados de violencia, detecta si hay cambios en tu respiración o temperatura corporal. Pon atención a las señales de tu cuerpo y marca si es que algunas de las agresiones ahí descritas han estado presentes en alguna relación, especialmente si es en la actual.

Una vez que hayas hecho ese diagnóstico, el siguiente paso es identificar cómo poner límites y tomar acciones para que no se repitan. Recuerda: ¡cero tolerancia a la violencia!

Si no sabes por dónde empezar, mi buzón de twitter está siempre abierto en @MaElenaEsparza y también puedes acudir al servicio jurídico y psicológico gratuito del Consejo Ciudadano de la CDMX, disponible en México e incluso a otros países a través de su Chat de Confianza: 55 5533 5533.

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María Elena Esparza Guevara
– Maestra en Desarrollo Humano por la Universidad Iberoamericana, guía de yoga y comunicóloga feminista
– Activista por una vida libre de violencia para niñas, mujeres y adultas mayores
– Se ha especializado en la conciencia corporal como una estrategia preventiva de las agresiones de género
– Actualmente es Asesora Honoraria del Consejo Ciudadano de la CDMX, desde donde diseña talleres y campañas de difusión para visibilizar los derechos de poblaciones vulnerables y empoderarlas