¿Cómo aprender a detener el miedo, la ansiedad, la depresión y otros pensamientos negativos? Descubre cómo hacerlo de la mano de Julio Diez Testa

En el día a día, nuestra mente se inclina por el pensamiento negativo. Hay una sucesión de asociaciones y respuestas inconscientes e involuntarias: miedos, proyecciones, suposiciones, predicciones, estados de evasión y distracción -entre muchas cuestiones más- que nos hacen vivir la mente de la negatividad. La mente no tiene preferencia por ser negativa: si tiene condiciones de contextos que la llevan a ser así, sobre todo en las grandes ciudades.

¿Te pasa que dices ya quiero callar esta parte de mi que me preocupa y perturba?

El ejercicio es una práctica que hay que cultivar. Así como ejercitamos el cuerpo, la mente necesita ponerse “fit”. Desde que despertamos en la mañana y cada acción que hacemos como consecuencia de nuestros hábitos mentales, emocionales y físicos, estamos condicionados por pensamientos de preocupación y conflicto. Estos sólo se superan con conciencia y con crear una mente bondadosa que piense bien de las cosas y que sepa que los problemas son –al mismo tiempo- oportunidades.

Detrás de cada problema al que te aferras hay una reacción neuronal que hace que entres en contacto con la mente del conflicto, se producen hormonas de las cuales somos dependientes. Pero si piensas bonito, si te enfocas en la gratitud y el amor, ese camino se revierte.

Pensamiento negativo

Te comparto algunos enfoques:

  • Haz que tu mente respire; frente a cada pensamiento, inhala y exhala profundo durante 5 minutos y deja que estos se suelten sin aferrarte a ellos
  • Date cuenta de tus propios juicios, de todo lo que te criticas y dices de ti. Tus juicios son una barrera para tener la mente calma.
  • Acepta tus fallas y errores. Si puedes hacer consciente que no siempre todo sale al 100 o que como te salió era lo mejor que estabas preparadx para hacer, te disculpas y continúas trabajando en mejorar.
  • Disminuye la autopercepción que tienes que ser la o el mejor, ganar y derribar o dejar a alguien en el camino. No hay competencia, hay autorrealización. Deja el perfeccionismo y cuídate a ti con amor.
  • Usa afirmaciones positivas cuando te gane la negatividad. Lo mismo, piénsalo positivamente y mejor.
  • Sé consciente con los demás y ten en cuenta a ti misma/o. No te olvides de verte a ti, de procurarte y darte espacio de conciencia para crecer. Adquiérelo en silencio o en prácticas como yoga o meditación.

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